La creación de un cuadro de mando de Power BI con múltiples fuentes de datos es un proyecto complejo que requiere una metodología planificada y estructurada para garantizar el éxito en cada una de las cuatro fases principales: toma de requerimientos, análisis funcional, diseño y despliegue en producción.

Toma de requerimientos

La primera fase del proyecto es la toma de requerimientos, en la que se establecen los objetivos y se identifican las necesidades de los usuarios. En esta fase, es esencial comprender el negocio y los procesos asociados para determinar los datos necesarios para el cuadro de mando. También se identifican las fuentes de datos disponibles y se evalúa su calidad y su pertinencia para el proyecto.

En esta fase, es importante definir los indicadores clave de rendimiento (KPI) que se utilizarán para medir el éxito del proyecto y establecer los criterios de selección y priorización de los datos.

Es fundamental contar con la participación de los usuarios para garantizar que los requerimientos sean precisos y que el cuadro de mando satisfaga sus necesidades.

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Análisis funcional

La segunda fase del proyecto es el análisis funcional, en la que se define la arquitectura del cuadro de mando y se elabora la especificación funcional detallada. En esta fase, se establecen los requisitos técnicos y se definen los procesos de integración de datos.

Además, en esta fase se identifican los KPI específicos que se utilizarán para medir el desempeño del negocio y se establecen los criterios de selección y priorización de los datos. Es fundamental contar con la colaboración de los usuarios para garantizar que la especificación funcional sea precisa y que se cumplan todos los requerimientos

Diseño

La tercera fase del proyecto es el diseño, en la que se elabora el diseño visual del cuadro de mando y se definen las medidas y métricas que se utilizarán para medir el desempeño del negocio. En esta fase, se establecen los criterios de diseño que garantizan la consistencia y la calidad visual del cuadro de mando.

También es importante definir la estructura del cuadro de mando y la relación entre los diferentes elementos, como las tablas, los gráficos, los informes y los paneles. En esta fase, se recomienda contar con la colaboración de usuarios clave para asegurarse de que el diseño del cuadro de mando sea fácil de entender e interpretar.

Despliegue en producción

La cuarta fase del proyecto es el despliegue en producción, en la que se implementa el cuadro de mando en un ambiente de producción. En esta fase, se realiza la integración de las diferentes fuentes de datos y se crean los modelos de datos que permiten una visualización precisa de los datos.

Puedes usar infinidad de soluciones para la carga de datos. Desde DataFlows, Datamarts, Datasets conectados… las solución técnica más apropiada se define en cada proyecto… y no es nada sencillo.

Es esencial que los datos sean precisos y estén actualizados para que los informes y los gráficos generados sean útiles para los usuarios.

Por último, en esta fase se establecen los procesos de mantenimiento y actualización del cuadro de mando para garantizar su funcionamiento continuo hasta conseguir llegar a aquí…